Hace
15 años podíamos leer en la prensa anuncios como el siguiente: “Se
busca persona discreta, con buena presencia y mecanografía perfecta
para un puesto de secretaria”. Desde entonces tanto el perfil como
las funciones y competencias del profesional del secretariado ha
sufrido una evolución.
Elisa del Pino, Presidenta
de la Federación Nacional de asociaciones del secretariado de España
nos dice que “el éxito del directivo es directamente proporcional
a la labor de su secretaria”.
Esto es evidente, los
profesionales del secretariado han pasado a desempeñar muchas más
tareas que las meramente administrativas. Además de atender llamadas
telefónicas, gestionar la agenda y organizar los viajes estos
profesionales deben adecuarse a la cultura empresarial de la
compañía, asumir responsabilidades y actuar con pro actividad.
Hoy en día las personas
que toman decisiones en las organizaciones requieren de personal
altamente cualificado a su lado. Se ha configurado un nuevo rol
profesional, capaz de asistir a sus superiores en condiciones
cambiantes y competitivas.
